Los Aromos Restaurant
AtrásLos Aromos Restaurant, situado en la Avenida Doctor Luis Gutnisky de Formosa, es un establecimiento que genera un notable espectro de opiniones entre quienes lo visitan. Integrado en la estructura del Howard Johnson Hotel & Casino, este restaurante se presenta como una opción gastronómica que, según el día y la experiencia, puede oscilar entre lo memorable y lo decepcionante. Esta dualidad lo convierte en un caso de estudio interesante para cualquier comensal que busque una nueva propuesta en la ciudad, especialmente para aquellos que anhelan la experiencia de los bodegones con una oferta culinaria variada.
Una Propuesta con Potencial y Platos Destacados
En sus mejores momentos, Los Aromos ofrece un ambiente descrito por varios clientes como "agradable" y tranquilo, ideal para una cena familiar o un encuentro más formal. La atención también ha sido calificada como "excelente" en diversas ocasiones, con un personal eficiente y dedicado que contribuye a una experiencia positiva. Este nivel de servicio, cuando se presenta, es uno de los pilares que sostiene la reputación del lugar y atrae tanto a huéspedes del hotel como a público local.
La carta parece ofrecer una variedad que se alinea con lo que muchos buscan en los bodegones con platos abundantes, fusionando la cocina argentina con otras influencias. Han surgido claros favoritos entre los platos. Los sorrentinos, por ejemplo, han sido elogiados como "deliciosos", demostrando un buen manejo de las pastas. Otro plato que ha recibido comentarios muy positivos es el "lomito lapacho negro", señalado como una de las especialidades más sabrosas y bien logradas del menú. Incluso se han reportado gestos de cortesía, como obsequiar un tiramisú, detalles que suman y dejan una grata impresión en el cliente.
Las Inconsistencias: El Talón de Aquiles del Restaurante
A pesar de sus puntos fuertes, la principal crítica que enfrenta Los Aromos es una marcada inconsistencia. La experiencia de un cliente puede ser diametralmente opuesta a la de otro, lo que sugiere una falta de estandarización en la calidad del servicio y la cocina. Esta variabilidad es un factor de riesgo para quien decide visitarlo, transformando la cena en una apuesta.
Uno de los problemas más graves y recurrentes es el servicio. Algunos comensales han detallado esperas excesivamente largas que empañan toda la experiencia. Se han reportado demoras de 25 minutos solo para recibir la carta, seguidas de 35 minutos más para una entrada y un total de 65 minutos para que llegue el plato principal. Lo más preocupante de este testimonio es que ocurrió en un momento en que el local no estaba particularmente concurrido, lo que apunta a posibles deficiencias en la organización interna de la cocina o del personal de sala.
Errores en la Cocina y Manejo de Quejas
La ejecución de los platos también ha sido objeto de críticas. Un cliente pidió un bife a punto y lo recibió crudo, un error básico en un restaurante que ofrece parrilla argentina. De manera similar, unas costillas de cerdo a la barbacoa fueron descritas como faltas de cocción. Estos fallos indican una irregularidad en el control de calidad de la cocina. Si bien no es un bodegón de barrio tradicional, se espera que los platos clásicos se preparen con solvencia.
Sin embargo, el incidente más alarmante relatado por un cliente involucra el manejo de una queja. Tras devolver una hamburguesa porque no se respetaron las indicaciones del pedido (se solicitó sin una salsa específica y llegó con ella), el plato regresó a la mesa de una forma que fue percibida como una "burla". Según el relato, la hamburguesa fue sobrecargada con medio kilogramo de pepino y cheddar, mientras la moza reía. Este tipo de respuesta no solo es poco profesional, sino que denota una falta de respeto hacia el cliente que es inaceptable en cualquier establecimiento gastronómico y que puede dañar irreversiblemente su reputación.
El Veredicto: ¿Vale la Pena la Visita?
Los Aromos Restaurant es un lugar de contrastes. Por un lado, tiene el potencial de ofrecer una velada excelente, con platos bien ejecutados como sus pastas o el lomito, en un ambiente confortable y con un servicio atento. Su ubicación dentro de un hotel le confiere un aire distinto al de un bodegón porteño clásico, pero su variada carta intenta capturar esa esencia de comida sustanciosa y reconocible.
Por otro lado, los testimonios negativos son serios y no pueden ser ignorados. Las demoras en el servicio, los errores en la cocción y, sobre todo, una respuesta inadecuada y burlona ante una queja, son señales de alerta importantes. La sensación de que la calidad y la variedad de la carta han disminuido con el tiempo, como señaló un cliente asiduo, también es un factor a considerar. Potenciales clientes deben ser conscientes de que la experiencia puede ser impredecible. La visita a Los Aromos puede resultar en una cena fantástica o en una profunda decepción, una dualidad que el restaurante necesita abordar para consolidar su propuesta y garantizar un estándar de calidad consistente para todos sus comensales.